De todas las absurdas vidas de princesas absurdas, yo creo que ésta se lleva la palma.
Y lo digo porque vaya vida de aburrimiento la de esta pobre muchacha.
Así de pronto, y por un desliz de los padres de no invitar a un hada cabrona ( Esta misma fue la que puso el marco digital a la madrastra de blanca Nieves ( Véase la vida de blanca Nieves ), ella tuvo que pagar el pato.
¿que que pato?Pues que tuvo que vivir en un reino en el que no había nada que tuviera punta.
Y todo para que ella no pudiera pincharse.
Esta Orden Real, se llevo a tal extremo, que en las revistas porno hasta los penes habían sido retocados con Photoshop y todos tenían forma de un huevo más. Las costuras de las bragas, encajes y enaguas se pegaban con velcro, porque en todo el reino era imposible encontrar una puñetera aguja de coser.
Uno no se puede hacer una idea de lo complicado que era vivir allí, pero era un lugar en donde nada, nada nada terminaba en punta. Incluso en las cartas que escribían, solo ponían comas para que esta pobre infeliz no se pinchara con los puntos.
Ahora bien, fueron tan cuidadosos con eliminar todas las puntas ( Se pusieron de moda los camper con sus formas redondas ) que no se les ocurre otra cosa que esconder la maquina de coser en la habitación contigua donde dormía esta infeliz.
Joder, un poco más ingeniosos y se la esconden debajo de su propia cama.
Yo me imagino que aunque el cuento no dice nada, al jefe de Seguridad de Palacio lo colgaron con alfileres redondos y lo dejaron así hasta que murió.
Hay un único episodio de esta infeliz que a mi me hace mucha gracia, y es que la muchacha estaba tan tremendamente salida que a veces cuando lograba escaparse al bosque y cantar aquello de "eres tu el príncipe azul que yo soñé...." la pobre se daba restregones contra los troncos de árbol hasta que quedaba extasiada y multiorgasmizada. ¿Por que soñaba con un príncipe azul?, ¿Acaso anhelaba el amor de algún príncipe pitufo? ¿Ignoraba ella que todos los pitufos eran maricones?.
No lo se, ni lo sabremos nunca, lo cierto es que entre canto y canto, venga a restregarse con los troncos. Los mozos del reino se escondían detrás del follaje para observarla, pero a ver quien era el osado que le clavaba la punta. Por más que ella iba detrás de los mozos con la enagua desvelcrochada, ellos miraban para otro lado, el Rey, había ordenado capar al que pinchara a la pobre infeliz.
Y así pasó la vida, ahora voy al campo y me desahogo y ahora vuelvo a casa y busco la puñetera maquina de coser.
Tampoco en este cuento nos informan de sus amistades, amigos y curiosidades. Sinceramente la Bella Durmiente era la más aburrida de todas.Podríamos añadirle algunas anécdotas y hacer que esta pobre infeliz hubiera tenido alguna anécdota divertida, un conejo parlanchín, un grillo mágico, algo, nada, del palacio al campo y del campo al palacio.
Y de pronto, zaca, se nos planta en los 18 años sin nada que contar en la vida.
Como sería de simple que le regalaron en vez de regalarle un diario, le regalaron un anuario y aún así nunca paso de una página. Ohhhh, casualidad, se encuentra con la maquina de coser, no solo eso, un aparato gigante y la muy imbecil solo sabe tocar la aguja y pincharse.¿que tipo de morfina tenía aquella aguja para que la dejara durmiendo 100 años?,
yo creo sinceramente que no hay hechizo que cien años dure y que esta chica lo único que hizo fue hacer honor a su nombre, ya que la llamaban la Bella Durmiente y que su vida ha quedado demostrado que no tenía ningún sentido, ella ni se pinchó ni nada, sencillamente se tumbo en la cama y a ver si viene alguno y me hace levantarme...... Un beso de verdadero amor.
Venga, otra que no hay que creerse. Lo que le pasaba a esta chica, es que aunque parecía que tenia los ojos totalmente cerrados, los tenía semiabiertos, de esta forma veía al príncipe que venía a besarla. Y no fueron pocos, fueron cien años de autentico morreo. El cuento original se suavizó un poco para que pudiera ser transmitido a los niños, pero lo cierto es que uno llegaba, se morreaba bien con ella, ya puestos se la tiraba y así iban pasando los años.
Encima después del acto, las damas de palacio la lavaban, la peinaban y la dejaban otra vez mona para el siguiente.En cien años, creemos que tuvo unos 50 bastardos, de esto el cuento infantil no dice ni mú.
Al principio los chiquillos correteaban por la habitación, luego los más mayores se fueron independizando y conquistando otros príncipes y principados, y así poco a poco, y como en aquel palacio todo era aburrido, el palacio fue quedándose otra vez vacío de gente.
El final original es mucho mejor que el ficticio que se inventaron, y que aún consta en el acta real de 1876 en el principado de Wallpurgis, pasados cien años, la muchacha despertó y se dio cuenta de que ya no era tan muchacha. A parte de tener el cuerpo lleno de escaras por la postura en la que estaba, se observo ella ajada y avejentada, y de pena se murió.
Pasaron muchos años más antes de que alguien se diera cuenta de que no estaba dormida sino muerta, y se dieron cuenta por un pequeño detalle, hacia muchos años que ya no se quedaba embarazada.
Sus hijos fueron felices, infelices, hubo de tó.
fin
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